Este regalo tiene dos variantes:

 

1. Diario de viaje:

 

Todo lo que vais a necesitar es:

 

• Un viaje

• Alguien con quien compartirlo

• Un cuaderno sin espiral (tipo Moleskine) o un álbum de fotos con hojas de cartulina.*

• Bolígrafos

• Pegamento y cinta adhesiva

• Fotos polaroid (opcional)

 

Procedimiento:

 

En este caso lo que vais a hacer es immortalizar vuestro viaje a medida que avanza: en él, debéis recoger vuestras aventuras diarias anotándolas al final del día o durante algún rato libre.

Para hacerlo, será muy importante detallar la fecha en la que ocurre cada pequeña aventura e ir añadiendo detalles como trípticos, entradas, tickets, fotos instantáneas, folletos informativos o todo lo que os vayáis encontrando durante vuestro viaje y que consideréis importante.

 

 

 

2. Historia de un viaje:

 

En esta variante, vais a necesitar lo mismo que en el Diario de viaje además de las fotografías que hayáis tomado durante vuestro viaje.

 

Procedimiento:

 

Esta opción se puede usar no solo como recuerdo, sino como regalo para la persona con la que compartiste esa aventura. Para ello, todo lo que deberás hacer es reunir todo aquello que reuniste durante el viaje — ya sean tickets, folletos, postales u otros —, e imprime las fotografías que más te gusten y describan mejor vuestra experiencia.

 

Pega en el álbum o el cuaderno todos estos elementos y añade una pequeña explicación para cada uno de ellos para que años más tarde, cuando la persona quiera recordar el viaje o encuentre ese álbum perdido en un rincón, pueda volver a sentir lo que sintió durante esos días compartidos contigo.

 

 

 

*Si queréis hacer el álbum aún más bonito, podéis forrarlo con mapas del sitio que visitásteis.